Jul. 06, 2025
Frente a la muerte, nadie queda neutral. Porque la Biblia nos dice que después de la muerte no hay reencarnación, no hay segunda oportunidad, no hay limbo… solo hay dos destinos eternos: El cielo o el infierno. “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto, el juicio…” — Hebreos 9:27 Por eso, el cáncer nos inquieta: nos obliga a mirar hacia la eternidad. Nos confronta con lo que muchos quieren ignorar: que estamos a un paso de la eternidad, y solo hay una manera de estar preparados: confiar en Cristo para salvación. El pasaje que vamos a estudiar hoy, se nos habla de un hombre a quien le predicaron el poderoso mensaje de salvación que trata sobre el único Salvador de pecadores—Jesucristo. Y veremos que la mayor necesidad del alma humana más urgente que la salud, más urgente que el éxito, más urgente que cualquier logro en esta vida—es conocer a Cristo como Salvador. Porque Cristo es el único que puede preparar a un pecador para encontrarse con Dios.